Llegan las navidades: comidas, cenas, familia, amigos, turrón, excesos... Ante todo, lo importantes es disfrutar. Ten en cuenta que lo que hagas en Navidad es algo puntual, la clave es lo que haces el resto del año. Dicho esto, no es plan de hacer el loco y encontrarte mal. Por ello queremos compartir nuestros tips favoritos para disfrutar cuidándote estas navidades.
1. Prioriza el orden de los alimentos: vegetales - proteína - carbohidratos - dulce. Empieza las comidas eligiendo algo de verdura o ensalada. Recuerda alimentos - no productos ni procesados. Y trata de que siempre haya vegetales que proteína o carbohidratos en tu plato.
2. Una vez te hayas saciado con alimentos tómate un postre que también es parte de las celebraciones navideñas. De todos modos si tienes opciones dulces más saludables, ¡mejor! Chocolate negro, fruta. Nos encanta acabar las comidas navideñas con piña o papaya ya que tienen enzimas digestivas que nos ayudan a digerir los alimentos.
3. También puedes acabar las comidas con una infusión de menta, hinojo, anís, regaliz, rooibos o manzanilla que son tónicos digestivos.
4. Otro truquito para mejorar las digestiones es tomarte una cucharadita de limón y jengibre o de vinagre antes de las comidas para estimular la secreción de los jugos gástricos y enzimas digestivas. Además ayudan a regular nos niveles de azúcar en sangre.
5. Come con tranquilidad masticando bien los alimentos. De nada sirve tanto remedio si no masticas lo suficiente. Recuerda, la digestión empieza en la boca.
6. Hablemos del alcohol. Son días en los que se va a beber más de lo habitual por lo que hay que controlarse un poco. Recomendamos empezar hidratándote bien. Intenta alargar no tomándote la primera ronda. Empieza con un agua, o agua con gas con una rodajita de limón y de paso añádele vinagre si se te ha olvidado tomártelo antes de salir de casa. Cuando empieces con vino proponte alternar un vaso de vino con uno de agua para que te siente mejor. Si te tomas unos vinitos mas de la cuenta, recuerda por la mañana que debes rehidratar y remineralizar y ¡qué mejor que un caldo de huesos!
7. Es fundamental escuchar a tu cuerpo. Es parece importantísimo identificar señales de hambre y saciedad. Come hasta que te sientas saciado y no comas si no tienes hambre. Ayunar te dará fuerza digestiva y te permitirá llegar a la siguiente comida más ligero. Por ejemplo, después de la comida de Navidad, que suele alargarse mucho, probablemente no tengas hambre a la hora de cenar. No cenes, o tómate una tacita de Caldos Cooldo, ¡ya verás como al día siguiente te encuentras fenomenal!
8. Por último, no te olvides de moverte. Intenta seguir con tus rutinas diarias de ejercicio de fuerza o Hitt aunque sean 15 minutos en casa. Y fundamental, salir a dar un paseo después de las comidas y cenas cuando sea posible para ayudar al músculo a quemar el azúcar que hemos consumido.
